La esperada continuación de la serie policiaca ambientada en La Habana de Vladimir Hernández, el nuevo maestro de totalitarismo noir.¿Qué tienen en común un sicario, un funcionario corporativo y un agente infiltrado muerto por sobredosis de éxtasis? El nexo podría ser un poderoso estupefaciente emparentado con el MDMA llamado Skyline, que amenaza por extenderse por La Habana.En la Cuba de los cambios pospuestos y la contrarreforma estatal, Eddy, un policía con tendencia a operar de forma expeditiva, necesita unir los puntos que desentrañan el entramado criminal en torno al Skyline, y para ello deberá enfrentar la burocracia interdepartamental de la Policía Nacional Revolucionaria, la astucia enemiga, y el acoso de un chantajista.
A resultas de la investigación sobre la trama Skyline, la vida de un hombre comienza su particular descenso a los infiernos, mientras un sicario, imparable máquina de matar, se pone en marcha con el propósito de eliminar cabos sueltos.Un paseo por la Habana Vieja, el corazón de la Habana, un corazón "hacinado", y por su Mazmorra, la comisaría del distrito, y un fresco sobre la corrupción que la corroe, pero también sobre el cubano y su condena, la condena de aquel que prefiere la inmolación al cambio.
Laura Fernández, El Mundo
Tres tenientes, tres casos y tres formas de ver una misma realidad, esto es lo que nos propone Vladimir Hernández en su Habana réquiem. El veterano Puyol, un policía intuitivo e inteligente que se ve obligado a enseñarnos su miserias. La arribista Ana Rosa, no todo vale y con ella nos daremos cuenta hasta donde llega la ética profesional. Y el impulsivo Eddy... qué decir de Eddy, dispara y luego pregunta, actúa y luego piensa, él nos conducirá por un vertiginoso viaje por su Habana Vieja.
Miguel Ángel Díaz de SomNegra en El País
Un thriller policiaco que desmonta el aperturismo de Cuba.
La esperada continuación de la serie policiaca ambientada en La Habana de Vladimir Hernández, el nuevo maestro de totalitarismo noir.¿Qué tienen en común un sicario, un funcionario corporativo y un agente infiltrado muerto por sobredosis de éxtasis? El nexo podría ser un poderoso estupefaciente emparentado con el MDMA llamado Skyline, que amenaza por extenderse por La Habana.En la Cuba de los cambios pospuestos y la contrarreforma estatal, Eddy, un policía con tendencia a operar de forma expeditiva, necesita unir los puntos que desentrañan el entramado criminal en torno al Skyline, y para ello deberá enfrentar la burocracia interdepartamental de la Policía Nacional Revolucionaria, la astucia enemiga, y el acoso de un chantajista.
A resultas de la investigación sobre la trama Skyline, la vida de un hombre comienza su particular descenso a los infiernos, mientras un sicario, imparable máquina de matar, se pone en marcha con el propósito de eliminar cabos sueltos.Un paseo por la Habana Vieja, el corazón de la Habana, un corazón "hacinado", y por su Mazmorra, la comisaría del distrito, y un fresco sobre la corrupción que la corroe, pero también sobre el cubano y su condena, la condena de aquel que prefiere la inmolación al cambio.
Laura Fernández, El Mundo
Tres tenientes, tres casos y tres formas de ver una misma realidad, esto es lo que nos propone Vladimir Hernández en su Habana réquiem. El veterano Puyol, un policía intuitivo e inteligente que se ve obligado a enseñarnos su miserias. La arribista Ana Rosa, no todo vale y con ella nos daremos cuenta hasta donde llega la ética profesional. Y el impulsivo Eddy... qué decir de Eddy, dispara y luego pregunta, actúa y luego piensa, él nos conducirá por un vertiginoso viaje por su Habana Vieja.
Miguel Ángel Díaz de SomNegra en El País
Un thriller policiaco que desmonta el aperturismo de Cuba.